Cualquier estudiante de Derecho, o de carreras administrativas que requieren cierto conocimiento del mismo, saben que el derecho, entre sus características, es consuetudinario, lo cual a su vez representa una de sus fuentes.
Dicho pues, que las leyes que rigen a las sociedades tienen entre sus origenes las costumbres de estas sociedades, no debe extrañarnos ni alarmarnos lo que conocemos como "La Ley del Talión".
Esta Ley tiene su representación en la expresión popular "ojo por ojo, diente por diente". Es un principio jurídico de justicia retributiva en el que la norma imponía un castigo que se identificaba con el crimen cometido. El término "Talión" deriva de la palabra latina "talis" que significa identica o semejante, de modo que no se refiere a una pena equivalente sino a una pena idéntica.